De Todo un Poco (VI)

Chávez al ataque
El año empieza y, como corresponde, toca poner en orden las ideas. Lo primero, hablar de política. Salir de eso rapidito porque no tengo Primperán a la mano y la arrechera me provoca náuseas.

Hugo Chávez renovó su mandato y no ha perdido el tiempo desde que se alzó con la victoria. Le concedió otro crédito-regalo a una cooperativa argentina por $ 120 millones, cambió su gabinete —con premio incluido a Jorge Rodríguez—, retomó su tren de viajes al exterior, anunció la no renovación de la concesión de RCTV y la Asamblea Nacional aprobó una tal Ley de Servicio Social con la que prácticamente todos estamos obligados a hacer un trabajo social en donde el Estado disponga.

Mientras tanto, ya se conocen cifras de la inflación anual venezolana, que llegó al 16 y pico por ciento (Colombia tuvo una inflación de 4,48% anual y el Imperio Mejmo, 2 y tanto). Los alimentos aumentaron algo así como 20% en 2006, la educación se ve amenazada por un programa que pretende ideologizar a los niños, la vialidad del país está de mal en peor, el desempleo sigue tan campante, la economía crece a punta de petrodólares (no de inversiones) y el hastío y el miedo parecen haberse apropiado de la gente. La gente del barrio Nueva Esparta sigue aislada desde que el Viaducto 1 se derrumbó y, lo que es peor, sin esperanzas de que nadie les eche una mano. Así sí es verdad que no provoca votar.

¿Qué le espera a este país con seis años más de revolución? Quisiera ser optimista pero ya tenemos ocho años a las costillas y todo indica que la situación empeorará, ahora más rápido que antes. Con el agravante de que la oposición se dejó meter el gol de la ley que mencioné antes y las reacciones han sido tibias. Ha habido un poco más de ruido por lo de RCTV pero no se percibe en la gente disposición a pelear por la defensa de sus derechos e intereses. La gente parece estar aún lamiéndose las heridas por la derrota del 3-D y a eso se le suma el asueto, que todo lo diluye. Amanecerá y veremos.

Arauca adentro
Otra vez en el llano, como hace un año. Y otra vez admirando los atardeceres y amaneceres de un lugar que para mí tiene mucho encanto. Siempre es un gusto ver los árboles llenos de garzas blancas y rojas, los zamuros a la orilla del camino (no como los de Caracas, éstos son más grandes, de la especie del Rey Zamuro) y una variedad de vegetación que se ve sólo llano adentro.

La vista se pierde en el horizonte, mientras el sol se va poniendo, encendido en su color rojo. El calor se le mete a uno por todos lados y el olor a monte se incrusta en la nariz. Lástima que esta zona no esté mejor atendida por el gobierno.

No es que la cosa sea mejor del otro lado de la frontera. Arauca, capital del departamento colombiano del mismo nombre, ha crecido. Eso es innegable. Pero conserva muchos rasgos del olvidado pueblo que fue hasta no hace mucho. En otro tiempo azotado por la guerrilla, el pueblo ahora está custodiado por el ejército. No es raro ver militares fuertemente armados por las calles, patrullando a pie o en camiones y carros. Ahora se respira seguridad y la gente se pasa horas sentada a la entrada de sus casas, conversando. Las rejas no están todo el tiempo trancadas y la gente sale a caminar de madrugada.

El sistema de alcantarillado del pueblo aún está en pañales. Este detalle permite darse cuenta de que el progreso no ha terminado de llegar a la zona, pese a la cantidad de petróleo que hay en ese departamento. Hay cuadras por las que uno camina y siente el típico olorcito de las aguas negras estancadas. Esa es una deuda que los gobernadores del Arauca tienen pendiente con sus habitantes desde hace años. Ojalá eso se remedie pronto.

Inicio de año con los blogueros
Hubo dos encuentros blogueros en Caracas apenas empezó el año. Me los perdí, uno por no estar aquí y el otro, por pelazón brutal. Ya tendré ocasión de empatarme en otros encuentros. Para más detalles, paséense por el blog de Depeco. La cosa estuvo muy buena y así lo reflejan las fotos.

Inventario de año nuevo
Y éste que está aquí debería sentarse con calmita a hacer una lista de propósitos para este año. Pero eso será cuando cumpla años, cosa para lo que me falta una semana exacta. Ahí hablaremos. Por lo pronto, he vuelto. A mi blog, a mis clases, a mi trabajo y a mi rutina. Con muchas ganas de seguir adelante en unas cosas y terminar otras. Ya nos leeremos.

Comentarios

Unknown dijo…
bueno pues mucha suerte con esos propósitos de año nuevo...dale constante jejejeje
Saludos
Unknown dijo…
Feliz cumpleaños Jorge! espero que la pases muy bien, un abrazo!

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