¡Madre fiestón! (y II)
Con la luna llena de la foto como marco, el Blogstock se celebró, como ya les medio conté en el post anterior. Birras, gente, muchas ganas de conocernos y toda la disposición a pasarla de lo mejor. Ésos fueron los ingredientes de ese fin de semana, en donde los límites se los ponía cada quien, según si se sentía en ambiente o no. Cero excusas. La música estaba, el clima también (¡qué frío tan hijo de la gran puta el que pegó en la madrugada, pana!) y el gentío. No hay sensación que se pueda comparar a la de verle la cara a gente a la que uno habitualmente lee. Es casi como "¡Oooohhh, conocí al pana que bloguea en tal página!" sin ponerse intenso. ;) ¿Qué más hubo aparte de los Henry Zakka , la bailoterapia y el trencito que relaté antes? Mucho, muchísimo más. No lo cuento todo porque 1.- el post se haría demasiado largo, 2.- ya han pasado dos semanas del guateque, y hay muchas y mejores reseñas que ésta y 3.- los que no pudieron ir no van a poder imaginarse 100% cómo fue la