De Todo un Poco (V)
¡¿Seducción de qué?! Es un lunes cualquiera. Para variar, ando atorado. Tengo prisa, las vacaciones me han hecho calcular mal el tiempo y ahorita, entre la morseadera y la ingestión abusiva de tele, se me ha hecho tarde para bañarme, almorzar e irme al trabajo. Me voy disparado al baño y me doy cuenta que el jabón se me terminó. Echo pestes contra el planeta porque me acuerdo que también se me acabó la reserva de jabón. Total, que termino explorando en el closet donde mi mamá guarda los jabones que mi papá compra para ambos. Encuentro un paquete de esos que juntan los jabones en grupos de tres. Lo rompo y saco uno. Entonces me pongo a leer la etiqueta. Vacilo entre la risa y el desdén al leer. ¡Qué ridiculez, vale! ¡¿Cómo es esto, pana?! Jabón (su nombre) – Seducción de Chocolate. Y bien chiquitico debajo decía: “Con vitaminas de fresa”. Incrédulo, me pongo a leer a toda mecha los ingredientes del jabón de marras porque todavía no me creo que un fabricante de jabones sea tan ridículo c